Un olor a un lugar inolvidable aún presente sin saber por qué, mientras un pie de manzana me recuerda a ese alguien de sonrisa encantadora, y que en este momento se encuentra a unas calles de aquí posiblemente viendo también a través de su ventana. Supongo que el poder trabajar por una semana en esa agencia de publicidad será una de las cosas que recuerde minutos antes de morir.
Pero ya han pasado meses. Horas interminables al teléfono y bbpineando; paseos en autos escoltados y postres invitados cuando más lo necesitaba.
Ahora queda la sensación de un beso que pudo ser en un elevador. Un par de libros esparcidos en el estudio de mi casa, y una foto borrosa de algo que quedó en el pasado. Quién diría que todo se podría tornar de manera tan excéntrica justo cuando di todo por acabado... (lo sé, he dicho demasiado, y lo he combinado con mis incoherencias permanentes)
Es agosto. Cómo pasa el tiempo. He tomado muchas tazas de café, he hecho muchas llamadas telefónicas, y he salido más de una vez por el lado de su casa... y ese aroma aún sigue perdido para reencontrarlo en el momento menos esperado. Y aunque no lo creas, no te extraño aunque te deseo siempre lo mejor.
Freakysita, diciendo cosas de más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario