El caos matutino, el oficio doméstico, las comidas, la familia, los amigos casi que olvidados y las cosas que quisiera hacer se postergan. Se congelan... Siento que con el pasar de todo, se me olvida quién soy, o para qué quise ser diseñadora... o por qué no llaman de ninguna editorial preguntando por la señorita de las gafas rojas.
No es divertido ver por la ventana sin moverme en toda la tarde. No es divertido pensar cosas, que tal vez nunca puedan pasar... Me dicen que debo empezar pro mí misma, pero cuando la fe se acaba lentamente no sé cómo seguir. Mi novio dice que me ama y que todo va a estar bien... Pero no veo cuándo será eso. Lo odio a ratos por ser tan positivo y yo, tan negativa...
Sé que la vida no es fácil. Que nada bueno llega si es por el camino sencillo. Cuántas veces no lo he dicho, lo he pensado o lo he gritado... Pero hay días más nublados que otros, días en los que no se sabe a ciencia cierta si llamarán de un lugar de los que he bombardeado con hojas de vida de diseño gráfico, o simplemente alguien de esa editorial que me dejó en suspenso hará esa llamada finalmente... así sea para decirme que lamentablemente no aceptaron mi manuscrito; pero a pesar de todo sonrío, y digo que la vida continúa.
Hoy no es uno de esos días.
Hoy quiero dejar el suspenso. Trato de buscar alternativas y el cielo vuelve a quedar negro. Se pasa el día, nada ocurre y la esperanza se va acabando como el suelo de esta espantosa ciudad. No sonrío. Todos se alejan y el horizonte se pierde.
Pero a nadie parece importarle desde que siga sentada en esta silla pretendiendo que no pasa nada. No puedo ser así, y no me conformo con las oportunidades pobres e infelices.
Freakysita, buscando el sol.
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